Respuestas de foro creadas
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Yo recomendaría “Dixit”. Aunque se puede jugar a partir de 8 años, es un juego que no tiene edad. Y a nivel de expresión y creatividad es genial, o sea que puede ayudar a desarrollar las habilidades comunicativas. A veces, cuando se juega en familia, se hacen evidentes las diferencias entre los referentes culturales según la edad (determinado argot concreto o películas y literatura que pueden pertenecer a una generación u a otra). Pero a pesar de este inconveniente, es una buena opción para pasar un rato divertido.
A nivel de áreas, se podría vincular especialmente en lengua o incluso en medio natural, si se utiliza una variante del juego como nos proponen en
https://bebeamordor.com/juegos-de-mesa-para-ciencias-de-la-naturaleza/Mirando la imagen del juego, si multiplicamos las 7 personas de la imagen por las 7 velas del pastel y luego lo multiplicamos por las 15 banderas que decoran la fiesta de cumpleaños, llegaríamos a 735.
A mi me sorprendió el juego del “Cargolino Valentino”. El objetivo del juego es llegar el último a la meta.
Es un juego para trabajar colores, pues el tablero son flores de colores y los caracoles también tienen distinto color. Al lanzar el dado únicamente se puede mover un caracol una vez hacia adelante, pero se puede escoger entre color de caracol o flor. Por lo tanto, empieza a tener elementos de estrategia interesantes. La edad recomendada es a partir de 5 años.Un juego no tiene ningún objetivo didáctico evidente, aunque esto no quiere decir que no trabaje determinadas habilidades y su propia motivación es la diversión.
En cambio, tanto el ABJ como la gamificación su finalidad principal es didàctica pero difieren básicamente en el tiempo de aplicación. La gamificación requiere mayor tiempo de aplicación y la planificación, ya que todo está conectado con un hilo conductor que lo engloba todo.Creo que la mayoría de juegos tienen en común tienen un alto grado de competitividad, o almenos una parte importante de reto, algo que motive al jugador. Y muchos de ellos, por supuesto, la socialización, ya que es relacionándonos con los demás que el juego nos mueve. Jugar a la oca uno solo o al parchís no tienen ningún aliciente.
Hola!
Me llamo Carme y soy maestra de música en Primaria. El último juego al que he jugado ha sido con mi hija de 10 años a un juego de cartas muy divertido: ” el abejorro tramposo”. Os lo recomiendo.Después del webinar en el que vimos una pequeña introducción, espero con este curso poder afianzar los conceptos y los fundamentos de la neurociencia para poder aplicar e incorporar en mi vida, tanto personal como docente.
Ganas de explorar un poco más dentro de nosotros mismos, poder dar un buen referente a los alumnos y darles la oportunidad de ser quien ellos quieran.
Muchas gracias!
