El aprendizaje interactivo es un conjunto de técnicas que nos llevan a transmitir los conocimientos al alumnado de forma en la que tengan que interactuar de una forma mucho más activa que en el modelo de educación convencional, donde el alumnado tiene un papel mucho más pasivo.
Gracias a esto, conseguimos mantener su atención y les ayudamos a retener los conocimientos mucho mejor, ya que el niño/a es una parte fundamental de la explicación y no solo el receptor/a.
¿Cómo se lleva el aprendizaje interactivo a nuestras clases?
Necesitaremos recursos didácticos pensados específicamente para este propósito, como las actividades interactivas, metodologías variadas que requieran de la interacción del alumnado, e incluso añadir contenidos gamificados. Una de las partes fundamentales del aprendizaje interactivo son las actividades. ¿Vamos a conocerlas?
¿Qué son las actividades interactivas?
Las actividades interactivas son recursos que reaccionan o responden a las acciones que el alumnado realiza sobre ellas. Por ejemplo, que al pulsar sobre un determinado botón se lance un dado o que al elegir la respuesta equivocada se muestre una explicación que le enseñe por qué esa no es la respuesta correcta.
Las posibilidades son prácticamente infinitas. Con la herramienta adecuada podemos crear el recurso perfecto y 100% personalizado para nuestro alumnado, sus necesidades o sus gustos. Esto, sumado a que se trata de un recurso interactivo, conseguirá un extra de atención, concentración y motivación por su parte.
Ventajas del aprendizaje interactivo en clase
El aprendizaje interactivo no solo consigue mantener “conectados” a los alumnos/as con la clase, además nos ofrece otras muchas ventajas sobre el modelo convencional. ¿Vemos algunas?
La diversión por bandera
Los recursos interactivos son mucho más divertidos y gustan más al alumnado, por lo que conseguimos una predisposición positiva a la hora de realizar la tarea.
Pueden ahorrarte tiempo
Ya te hemos dado una pista por ahí arriba: Puedes programar estas actividades para que identifiquen si la respuesta del alumnado es correcta o no. De este modo, consigues actividades que se corrigen solas y te dejan más tiempo para dedicar a otras cosas.
Son adaptables y escalables
Las actividades interactivas son mucho más sencillas de adaptar a nuestro alumnado gracias a su naturaleza “dinámica”. De igual forma, son actividades que son muy sencillas de actualizar en base al feedback del alumnado. Por ejemplo: Si detectamos que una actividad en concreto les cuesta, podemos añadir una imagen o un botoncito “?” de ayuda. De este modo, cuando el alumnado pulse, verá una explicación más detallada de la actividad o una imagen explicativa.
Herramientas para llevar el aprendizaje interactivo al aula
PowerPoint
La conocida herramienta de la suite ofimática de Microsoft es una muy buena opción para crear actividades y presentaciones interactivas. Es una herramienta con muchas funciones y con una interfaz que conocemos desde hace muchos años.
>> Aprende a crear actividades interactivas con PowerPoint<<
Canva:
Canva, la herramienta de diseño para no diseñadores también nos permite crear actividades y recursos interactivos para llevar a nuestra aula con una interfaz muy sencilla y lo mejor, totalmente gratis.
>> Aprende a crear actividades interactivas con Canva<<
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Nearpod:
Es una herramienta que nos permita crear actividades y presentaciones interactivas también… Pero va un paso más allá. Esta herramienta nos ayuda a transformar cualquier actividad en una actividad interactiva que involucre al alumnado y que proporcione retroalimentación al docente.
Genially
Uno de los pesos pesados del sector. Genially ofrece un sinfín de posibilidades a la hora de crear recursos interactivos para nuestro alumnado y nos permite la integración con Google Classroom y Teams para la educación.